Marino,a sus 96 años es natural de Granada y tras asentarse en esta localidad, encontró en 1950 en el cultivo de la naranja navelina su verdadero propósito como agricultor, gestionando más de 5 hectáreas
Como nos aconseja Marino,
“Las claves para el buen cuidado de la naranja parte del cuidado de la tierra, de los árboles, de permitir un crecimiento natural que permita que las naranjas maduren en el árbol absorbiendo así todos los nutrientes y dotándolas de gran jugosidad y sabor”.